Como cada fin de jornada, religiosamente y casi rozando el trastorno obsesivo compulsivo, terminamos echando una cerves en El Vinillo (el bar de al lado), y de paso recoger el nuestra pizarra publicitaria que tenemos en su esquina.
Ese día, nuestro camarero favorito al servirnos el tentempié de marras… nos confesó su caso:
«Desde hace mucho tiempo no puedo quitarme a Gengis Kan de la cabeza, …y lo que más me raya es que nadie entiende mi movida»
Unas horas después en el estudio su necesidad quedó gratamente solucionada y ahora todo el mundo puede hacerse una idea más clara de su movida.
PD. La pizarra se quedó toda la noche en la calle y la perdimos…
Puntuá esta publicación, es muy importante para nuestro equilibrio PsicoEmocional!
Total votes: 13
Votos positivos: 1
Porcentaje de votos positivos 7.692308%
Votos negativos: 12
Porcentaje de votos negativos